Introducción
Namo tassa bhagavato arahato sammāsambuddhassa
Introduction to 1.3.9
Saṅghabhedasuttaṃ - El cisma en el Saṅgha
Nālāgiriṃ gajavaraṃ atimattabhūtaṃ;
Dāvaggicakkamasanīva, sudāruṇantaṃ;
Mettambusekavidhinā jitavā munindo;
Taṃ tejasā bhavatu te jayamaṅgalāni
Como un círculo de fuego en la jungla, implacable como un rayo,
El noble elefante Nālāgiri, estando extremadamente intoxicado,
Al rociar mettā como agua que lo extingue, el sabio de los Munis lo conquistó,
A través de este poder, que la gozosa victoria sea vuestra.1
Este sutta presenta una selección del Udānapāḷi, una colección de eventos y observaciones del Buddha que se llama Udānapāḷi. Estas ‘exclamaciones de júbilo’ —‘udāna’— al final mismo de cada sutta pronunciado por el Iluminado están recogidas en el libro del mismo nombre. Concluyen con versos en forma métrica que se introducen con la misma fórmula: ‘Habiendo entendido el significado (más profundo) de ello’: —‘etamatthaṃ viditvā’— ‘él expresó esa solemne declaración’ —‘imaṃ udānaṃ udānesi’—.
El Saṅghabhedasutta comienza con la frase de apertura —‘evaṃ me sutaṃ’— que señala el hecho histórico de que este sutta fue presenciado y luego reiterado por el Venerable Ānanda, quien de este modo presentó todos los textos que él escuchó personalmente. Ānanda fue interrogado durante el Primer Consejo del Dhamma por el Venerable Mahā Kassapa sobre la hora, el lugar y el contenido de los suttas del Buddha que escuchó Ānanda, quien tenía una memoria similar a la de una computadora y una capacidad sobrenatural de recordar.2
Las circunstancias y el lugar de este hecho se llamó ‘veḷuvane kalandakanivāpe’ cerca de Rājagaha, que era un lugar de descanso preferido del Buddha. Había sido un parque de recreo del rey Bimbimsāra. Una vez el rey había ido allí a hacer un picnic y al estar solo se había quedado dormido. Una serpiente fue atraída por el olor de la comida y mientras la serpiente se acercaba, una ardilla trinó para despertar y salvar al rey. En agradecimiento, el rey Bimbimsāra ordenó que se les diera comida — ‘nivāpa’— regularmente a las ardillas–—‘kalandakā’— en este ‘bosque —‘vane’— de bambú —‘veḷu’—. En un ocasión después de la muerte del Buddha, se le preguntó al Venerable Ānanda acerca de este bosque y lo describió de la siguiente manera:
‘‘… Taggha, brāhmaṇa, veḷuvanaṃ ramaṇīyañceva appasaddañca appanigghosañca3 vijanavātaṃ manussarāhasseyyakaṃ paṭisallānasāruppaṃ…”4
“… Efectivamente, Brahmán, verdaderamente el Bosque de Bambú es agradable, casi sin ruidos molestos, silencioso y sin voces, rodeado de una atmósfera de privacidad, estando vacío de gente, propicio para la reclusión. ...”
Devadatta era el famoso antagonista del Buddha y hermano o medio hermano de Ānanda. Ambos habían ingresado a la orden junto con cuatro amigos bajo su barbero Upāli. Devadatta había intentado matar al Buddha tres veces con la ayuda de su amigo el rey Ajātasattu, pero nunca lo logró. El rey finalmente se vio obligado a retirar su patrocinio de Devadatta, porque estalló un ultraje entre la gente de Rājagaha después de su último intento de matar al Buddha en público por Nālāgiri, el poderoso elefante intoxicado del rey. Cuando se acercó, el Buddha tocó suavemente a Nālāgiri inundándolo de mettā y éste se arrodilló, presentando sus respetos al Buddha.
Más tarde, Devadatta decidió crear un cisma en la orden y comenzar su propia Saṅghā pidiéndole al Buddha que siguiera reglas más estrictas que las establecidas en el Vinaya, es decir, nunca dormir en ningún otro lugar excepto en la raíz del árbol, usar solo túnicas de prendas desechadas, etc.5 Después de que el Buddha se rehusara a hacer que estas reglas fueran obligatorias, Devadatta encontró un grupo de seguidores de alrededor de 500 bhikkhus y luego le dijo a Ānanda que a partir de ese día crearía su propio Bhikkhusaṅghā como se relata en este sutta. Más tarde, el Buddha envió a los dos principales discípulos, el Venerable Sāriputta y el Venerable Mahā Moggallāna6 a Devadatta y al grupo de quinientos que se habían reunido a su alrededor. Bajo la falsa impresión de que incluso esos dos eminentes bhikkhus se unirían a él, Devadatta se regocijó cuando los vio aproximarse. Más tarde, agotado por un largo discurso a sus seguidores, Devadatta le pidió al Venerable Sāriputta que continuara en su nombre. El efecto fue que esta charla restableció la fe en el Iluminado, y todos abandonaron a Devadatta. Cuando se dio cuenta de lo que había sucedido, enfermó gravemente durante un largo período.7
La hostilidad de Devadatta hacia el Buddha había aumentado a lo largo de muchas vidas, desde su primer encuentro cuando ambos eran comerciantes. En aquel tiempo, Devadatta fue el primero en encontrarse con una abuela extremadamente pobre con su nieta, cuya única posesión de valor era una reliquia familiar, un cuenco dorado del que comían. Aunque el oro estaba cubierto, el vendedor ambulante Devadatta entendió de inmediato su verdadero valor, pero sus propietarios lo desconocían. En lugar de darle su verdadero valor, lo tiró para expresar su falta de valor, planeando volver más tarde y obtenerlo sin ningún costo. Mientras tanto, el Bodhisatta, siendo él mismo un vendedor ambulante, llegó al mismo lugar y cambió el cuenco por su verdadero valor y se fue. Cuando Devadatta regresó y descubrió lo que había sucedido, corrió tras el Bodhisatta que al mismo tiempo había cruzado el río cercano. Al darse cuenta de que había desperdiciado su oportunidad por pura codicia, Devadatta se molestó tanto que su corazón estalló y cayó muerto. Muchos Jātakas (historias de nacimiento de existencias anteriores del Buddha) relatan más sucesos y cómo cada vez aumentaba el odio de Devadatta hacia el Bodhisatta.
Algunas notas finales sobre términos importantes usados en este sutta:
Uno puede notar aquí que el apelativo ‘āyasmā’ no se usa para Devadatta sino para todos los demás Theras. ‘Āyasmā’ es el apelativo respetuoso de un Venerable Thera, un bhikkhu de alto nivel. El término ‘āvuso’ se usa en una conversación entre bhikkhus de la misma posición.
‘Uposatha (lit. ayuno) es una expresión para denotar los días siguientes a la noche completa, media, octava y decimocuarta del círculo lunar que tradicionalmente se usaban para observar los cinco y ocho preceptos y dedicarse a la meditación. También eran los días en que la Saṅgha se reunía para confesar sus faltas y expresar sus temores y recitar el Pātimokkha.
1. Jayamaṅgalagāthā, recitado el día cuatro del curso de 10 días por S.N.Goenka, refiriéndose al incidente y al 'ataque' causado por Devadatta.
2. Más sobre la historia de los concilios y el papel que juega el Venerable Ānanda aquí en las introducciones a partir de 2.1.4 Paṭhama-asappurisasuttaṃ - ‘Acerca de una persona indigna’ en adelante.
3. appanigghosañca: appa + nigghosaṃ + ca: poco + ruido, gritos, voces + y.
4. Gopakamoggallānasuttaṃ, Devadahavaggo, Uparipaṇṇāsapāḷi, Majjhimanikāye.
5. Para más detalles ver 3.6.3 Parābhavasuttaṃ - Las causas de la caída.
6. Ver también 1.3.8 Caṅkamasuttaṃ - ‘Unidos por las inclinaciones’ sobre la estrecha amistad entre el Venerable Sāriputta y el Venerable Mahā Moggallāna.
7. Se dice que Devadatta más tarde fue tragado por la tierra pero a pesar de su maldad en el momento de la muerte declaró que no tenía otro refugio que el Buddha: ‘natthi me saraṇaṃ aññaṃ, Buddho me saraṇaṃ varaṃ’.